23.12.15

Nothingness and Desire

Autor: James W. Heisig
Año: 2003
País: USA

Género: Filosofía

Frase inicial:
"The pursuit of certitude and wealth lies at the foundations of the growth of human societies."

Aún cuando la estructura del inglés de Heisig dificulta un tanto la lectura, el autor trata con sencillez temas bastante complicados como la separación de los modos de pensamiento entre Oriente y Occidente, la nada, el yo, el deseo, la conciencia y por ende: Dios, voluntad, libertad.

Si bien puede parecer un libro de moral o de crítica social, Heisig va más allá porque no intenta establecer nada. De hecho, los dos términos principales sobre los que gira el libro son referidos desde un inicio como ficciones cuyo propósito es servir de guía para un cuestionamiento del pensamiento que compartimos como cultura occidental consumista de modo que se produzca una transición hacia otros esquema de pensamiento y por ende hacia otra forma de actuar.

A mi parecer es un libro de trabajo porque la reflexión es inevitable. Quizá sea conveniente leer algo de la filosofía oriental para comprender mejor el tema de la nada y del no-yo. La mayor dificultad puede presentarse si se es partidario del pensamiento causa-efecto o si se buscan respuestas concisas, procedimientos o "para qués".

Habremos de imaginar el mundo de forma diferente, cuestionar nuestras certezas y nuestras creencias. Habremos de cuestionar cómo nos relacionamos con las cosas de las que nos hacemos pues ellas nos revelan algo de cómo vemos el mundo y cómo nos vemos a nosotros mismos.


1.12.15

Moira

Escritor: Martin Heidegger
Año: 1954
País: Alemania
Género: Ensayo

Frase inicial:
"La relación entre pensar y ser mueve toda la meditación occidental."

La parte complicada de leer a Heidegger, además de su estilo que muchos han llamado hermético, son las palabras clave que leemos por inercia desde otro contexto. Podemos empezar por "ser" que es por donde empieza Heidegger desde Ser y tiempo, seguirnos en este ensayo con "pensar", porque ser y pensar se copertenecen, para aquí mismo entender a qué se refiere Heidegger con "lenguaje".

Ni "ser" es una entidad, ni "pensar" un representar —menos un acto de la conciencia, que aquí está entendida como causa de la voluntad—, ni "lenguaje" un hablar. ¿Cómo comprender esto si pensamos siempre desde términos dualistas, es decir, desde el establecimiento sujeto-objeto base de toda forma de dilucidar la realidad en la tradición occidental que es la misma tradición de las ciencias.

Heidegger se sitúa para esta meditación desde Parménides porque entre más nos llevemos a lo inicial más podemos reponernos de la separación a la que dio pauta la metafísica, esto es, del representarnos el mundo como lo hacemos ahora que, dicho sea de paso, no podemos superar.

Ser, pensar y lenguaje corresponden al lugar del pliegue que nombra lo "esente", el entre del ser y el ente. ¿Es que todo esto es lo mismo? Aquí entra otra palabra en juego: "mismo" [tò autó] que empieza por apuntar a un enigma.

Lenguaje es lógos y physisLógos, ya dijo Heidegger en su ensayo "Logos", es Alétheia, el ser de la verdad.

¿Qué deberíamos experimentar con "lo mismo"? No podemos tasar a cada palabra igual porque bien sería lógico quedarnos con una y prescindir de las otras. Claro está que physislógos, verdad, razón, naturaleza, hace mucho que en su uso dejaron atrás a Alétheia. Hemos dejado de meditar en lo inicial, de anticiparnos al despliegue del pliegue.

El pensar es un decir que prevalece en el pliegue, es una coligación en cuyo parecer puede aparecer lo presente, es la forma en que se nos da lo ente. Y en todo lo pensado siempre queda algo oculto.

¿Es Alétheia un producto mental vacío? Todo lo que no tiene un referente a lo ente parece vacío, pero no es sino lo que se queda, por pensar, en el oído, y que clama ser nombrado, salir a la luz.

Qué es la verdad sino un salir a la luz, el despliegue del pliegue, lo Mismo, dejando así pertenecer el pensar al ser y además, este pensar está incluido en la totalidad de la presencia. En lo Mismo guarda silencio el otorgar desocultante.

No hay luz fuera de la luz, pero tratemos de pensar el venir a la luz.